martes, 27 de diciembre de 2011


Este animal, que en sí mismo ya merece reconocimiento por su colaboración sin igual con el hombre, puede servirnos como medio de sensibilización hacia el mundo animal y además como vínculo de acercamiento a un mundo rural que cada vez nos parece más lejano.

El burro patrimonio de la humanidad

El burro es patrimonio de la humanidad, parte integral del medio ambiente y de nuestra cultura.
En España, comparten su vida con el hombre desde hace casi 3.000 años.
Tradicionalmente el burro ha formado parte de la vida cotidiana en las zonas rurales, donde su colaboración con los humanos ha sido incuestionable.
Utilizados tanto para labores agrícolas, como para transportar cargas o como tiro de carros, han supuesto una herramienta fundamental para el hombre, sobre todo en el campo, pero también en la ciudad.
Con la mecanización de la agricultura y la modernización del transporte, la utilidad del burro se va viendo mermada y con ello también el número de ejemplares.

Actualmente, el burro ha sufrido una evolución muy positiva en cuanto a las tareas para las que, tradicionalmente, eran utilizados. Ahora sus capacidades se invierten, además de en el transporte de animales, personas y mercancías, en diversos usos como terapias para personas con discapacidades físicas y mentales, paseos y rutas ecológicas.
No obstante, si queremos darle una oportunidad de continuación a esta especie a la que tanto le debemos los humanos, es necesario potenciar y divulgar nuevas vías de utilidad para estos animales.

lunes, 26 de diciembre de 2011

¿Cómo es el burro?

El burro ( Equus Africanus Asinus),es un animal doméstico de la familia de los équidos, su ancestro salvaje fue el burro africano, especies nubia y somalí . Fueron domesticados por primera vez en el siglo V a. de C. y desde entonces han sido utilizados por el hombre como animales de carga y como cabalgadura.
Los burros varían considerablemente de tamaño. La mayoría de los burros domésticos tienen una talla que oscila entre 0,9 y 1,4 m hasta la cruz, aunque hay variedades mayores como la raza andaluza-cordobesa que puede superar los 1,6 m o el burro catalán que llega a los 1,65 m. La coloración y longitud de su pelo también es muy variable.
Los burros son más longevos que los caballos, llegando a vivir hasta los 40 años. Tienen mala reputación por su terquedad, pero esto se debe a la mala interpretación de algunas personas de su instinto de conservación altamente desarrollado. Sin embargo, son animales inteligentes, cautelosos, amistosos, juguetones e interesados en aprender. Una vez que se haya ganado su confianza pueden ser buenos compañeros en trabajo y recreación.